miércoles, 9 de septiembre de 2015

                                                                         MINDFULNESS


"Hoy la vida se está complicando cada día más, también la mente se está complicando. La tendencia que tenemos es a creer que una vida complicada ha complicado la mente… la realidad es exactamente la contraria… UNA MENTE COMPLICADA, COMPLICA LA VIDA" 
Nicolas Caballero 

Mindfulness es una Meditación para el desarrollo de la Atención Plena. Es una práctica que educa la atención, para educar la mente y generar progresivamente una utilización integral del cerebro. Este funcionamiento del cerebro va produciendo un correlato en el cuerpo, a través de un proceso de desaprender viejos hábitos para desarrollar una mente más simple, que pueda percibir el presente en el presente.
 La Atención Plena consiste en estar presentes en el momento presente. Para esto es necesario darse cuenta de aquello que hace a nuestra realidad, es decir, del mundo exterior y del interior y por otro lado, del mundo de la fantasía.
El darse cuenta del mundo exterior se genera a través del contacto sensorial actual con objetos y eventos: lo que veo, toco, palpo, escucho, degusto o huelo.
El darse cuenta del mundo interior, se genera a través del contacto sensorial actual con nuestro interior. Lo que ahora siento desde debajo de mi piel, tensiones musculares y movimientos, manifestaciones físicas de los sentimientos y emociones.
El darse cuenta del mundo de la fantasía. Esto incluye toda la actividad mental, que abarca mas allá de lo que transcurre en el presente: todo el explicar, imaginar, adivinar, pensar, planificar, recordar el pasado, anticipar el futuro, etc. Si mi mente está vacía de imágenes, ideas, intenciones, prejuicios y demandas, entonces -y solo entonces- puedo estar en contacto con mi real experiencia del mundo, equilibrada y centrada sobre el presente de mi percibir y responder.
Un completo darme cuenta de mi experiencia requiere una completa aceptación de esa experiencia tal como ella es.
 Mindfulness es una Meditación que trabaja con dos niveles de profundidad:
 -Focalizando la atención. Lo cual ayuda a generar sensaciones de calma y tranquilidad.
 -Observando sin juzgar el mundo exterior, interior y la fantasía.
 Este trabajo de observación imparcial va generando en la práctica sostenida la posibilidad de que se debilite la mente reactiva, es decir, pudiendo observar cual es el impacto de lo percibido sobre mi mundo interior y fantasía, puedo transformar las habituales respuestas ante este impacto.
Se ejercita la atención pura, como una manera de separar las interpretaciones de lo que sucede, la realidad de lo que sucede. La mente automática tiende a dejarse llevar permanentemente por interpretaciones que condicionan el contacto con la realidad. El cúmulo de estas reacciones condicionadas son las que producen el sufrimiento psicológico.
 La mente condicionada tiende a pasar de pasado a futuro, perdiendo contacto con el presente. El trabajo de Mindfulness establece el contacto con el momento presente a través de aquello que percibimos directamente a través de nuestros sentidos, y de aquello que percibimos directamente a través de la observación de sensaciones de nuestro propio cuerpo. De modo paulatino se va posibilitando el proceso de des-aprendizaje de hábitos nocivos.
Hoy la medicina basada en evidencia comprueba que la práctica de Mindfulness modifica en el cerebro áreas y circuitos. A nivel cerebral se aumenta la neuroplasticidad que facilita el aprendizaje de nuevos hábitos ligados a la salud.
Se sabe también que la práctica continuada contribuye a generar un sistema inmune más estable. Además, la práctica de Mindfulness enseña a gobernar las emociones, para que estas impacten de modo positivo sobre la salud psicofísica y está directamente ligada a un descenso en los niveles de ansiedad. 


Lic. Clara Prchal

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